Los Sanjuanes


En la zona de Otavalo, provincia de Imbabura, el rito de los sanjuanes principia con el baño ceremonial en las vertientes, cascadas y ojos de agua, especialmente en la cascada de Peguche, cuyas aguas provienen del lago San Pablo. 

El baño nocturno purifica y da fuerzas para la fiesta, que hasta mediados del siglo pasado asumía la forma de una guerra ritual; una comunidad intentaba tomar por la fuerza la plaza vecina y corrìa sangre e incluso había muertos. 

Algo de esos enfrentamientos persiste en el área de Cotacachi, donde se disputan las esquinas de la plaza. A ello se debe que quienes fungen de diablo humas sean los màs fuertes y lleven fuetes para atacar y defender a los suyos.

El grupo de sanjuanes trota por el campo al ritmo de guitarras, rondines y canciones, cruzando quebradas, entre los eucaliptos, por los chaquiñanes hasta llegar a la hacienda Angla, de la familia Plaza, para entregar los gallos.

Por la tarde grupos de bailarines de diversas comunidades, se reúnen en el estadio del pueblo de San Pablo del Lago para concursar.

Al siguiente día será la ocupación ritual de la capilla de San Juan Capilla en Otavalo.